Me ha llevado más de 7 años y gran parte de mis ahorros en perfeccionar esta técnica, y ahora que la domino, mi misión se ha transformado en darla a conocer a los demás para compartir la magia, la fascinación y la relajación que me aporta esta expresión artística.
Ya son más de 3000 personas entre Madrid, Barcelona, Valencia, Tenerife, Gran Canaria y Bilbao que decidieron salir de la rutina y aprender sobre este arte. Me llena de satisfacción ver cómo liberan su talento para crear piezas únicas y poder ahorrarles la frustración que puede aparecer al empezar una técnica como ésta en solitario.